Habría que comenzar este post, hablando del principal cáncer (entre comillas) de los ciudadanos, que no es otro que en una gran mayoría el reconocido pasotismo por todo. Tenemos muchas cosas buenas, pero en cuanto al apartado de quejas y de reivindicar lo nuestro, dejamos muchísimo que desear. Nos importa todo cuatro mierdas y tenemos poca, muy poca o una nula conciencia social, nuestra casa y nuestras cosas empiezan de puertas para dentro.
Es triste ver como esta característica tan nuestra nos lleva a aguantar a personajes que se autodenominan nuestros representantes y que lo único que saben es, aunque en algunos casos de muy mala manera, ganarse la vida sin dar palo al agua.
Todo nos da igual, que nos talan todos los árboles, “pues mejor, así menos hojas que limpiar y menos trabajo”, que destrozan el mobiliario urbano “pues vale, no lo usaba…”, que no hay quien circule por la general, “pues bueno, para lo que hay que hacer…”. Que no tenemos transporte a los pueblos “pues vale, si a mí me gusta ir en coche”, que no tenemos ni una fuente en la villa “pues mejor, que seguro que la usa algún vecino…” que el Ministerio de Defensa decide probar algún arma de destrucción masiva en nuestro territorio “pues está bien que de vez en cuando se acuerden de nosotros…”.
Si es que en el fondo tenemos lo que nos merecemos, y despreciamos lo que tenemos. Se nos llena la boca alabando otros lugares y sin embargo lo nuestro lo ignoramos. Cuando hablas con gente de fuera de Laviana, que han elegido nuestro concejo para vivir, ellos se sienten más orgullosos de su tierra adoptiva que muchos lavianeses. Deberíamos estar orgullosos de nuestros logros y dejar de lado la actitud de “Laviana es una mierda ¿para qué vas a quejarte si no sirve para nada?” hay que ver las cosas buenas, que las tenemos y de las muchas que deberían mejorar quejarnos y al menos sacarle los colores a esos políticos que votamos y que dicen son nuestros representantes.
Mensaje al viento, cuando nos enteremos de las cosas que suceden en nuestros pueblos, cuando nos tomen el pelo o cuando simplemente alguien se meta con nuestra tierra nos debería hervir la sangre y encabronarnos, exigir que las cosas funcionen bien y defender lo nuestro, no es cuestión de ceguera, es cuestión de que si nosotros no cuidamos de lo nuestro ¿quién va a hacerlo?
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